Colorido, vibrante, vivo: ¡de eso se trata el art déco! Y de eso se trata también Miami Beach, el centro de moda del país en cuanto a edificios y atracciones de estilo art déco.  

El distrito histórico art déco de Miami Beach proviene de los años 20 y 30, cuando el art déco llegó por primera vez a Estados Unidos. La zona cuenta con más de 800 edificios históricos designados, la mayoría de los cuales lucen los icónicos colores neón, curvas geométricas y detalles cromados del estilo arquitectónico.  

Muchos de los edificios son hoteles, como Beacon South Beach, Colony Hotel y National Hotel. Pero otros lugares como Lincoln Road ofrecen tiendas, restaurantes y bares, mientras Lummus Park ofrece una vista impresionante del horizonte art déco. La Miami Design Preservation League ofrece recorridos a pie diarios para que pueda admirar los lugares de interés.  

Pero también hay otras cosas que hacer en Miami Beach. Le recomendamos un realizar un recorrido en kayak a través de aguas cristalinas y sinuosos manglares. O continúe apreciando el diseño en The Bass, un museo de arte contemporáneo; Ubicado en un edificio Art Deco, el espacio sirvió como el primer espacio de exhibición de arte en el sur de Florida.

También puedes comer algo en uno de los restaurantes de clase mundial de la zona, tan impresionantes por dentro como por fuera. Cerca de The Bass, Jaya at The Setai ofrece cocina en horno tandoor en un entorno que solo puede describirse como un oasis tropical interior. Le Jardinier en el Design District de Miami es un restaurante francés informal pero exclusivo conocido por su menú de verduras y su diseño inspirado en mediados de siglo, acentuado con una exuberante vegetación. Para una opción más relajada, visite Doya, que sirve comida mediterránea moderna, en el barrio Wynwood de Miami, hogar de murales y obras a gran escala de algunos de los artistas callejeros más conocidos del mundo.  

 

Asheville, Carolina del Norte  

Arquitectura: Neoclásica, renacentista románica, gótica y más 

Al igual que Miami Beach, Asheville, Carolina del Norte, tuvo un auge arquitectónico en los años 20. Pero en lugar de ceñirse a un estilo, Asheville se diversificó con al menos seis perfiles arquitectónicos distintos presentes en toda la ciudad.  

Muchas de estas bellezas se pueden ver en el Urban Trail de Asheville, un recorrido a pie de 1.7 millas a través de las calles del centro de Asheville. El Grove Arcade, por ejemplo, abrió sus puertas por primera vez en 1929 como un extenso centro comercial cubierto marcado por gárgolas góticas y elementos de hierro decorativos. Luego está el Drhumor Building, construido en 1895, que recuerda al renacimiento románico con pesadas paredes de ladrillo y curvas redondeadas.  

Pero la Biltmore House es quizás la joya de la ciudad. Terminado en 1895, Biltmore House es un extenso chateau de 250 habitaciones con un estilo renacentista francés construido por George Vanderbilt. Los Vanderbilt alguna vez fueron la familia más rica del país y acumularon riquezas al invertir en barcos de vapor y ferrocarriles. 

Si desea prolongar su estadía en Asheville, la zona ofrece muchas opciones. El propio Biltmore House tiene algunas opciones de alojamiento, pero también podría alojarse en el cercano Haywood Park Hotel, que antes eran unos grandes almacenes. El North Carolina Arboretum gratuito tiene acres de jardines cuidadosamente seleccionados y senderos para explorar. Y para comer algo, pruebe The Odd, un bar nocturno y restaurante con decoración y diseño fuera de lo común.